Cual es el Ambiente para los Negocios en Uruguay
Uruguay lidera los principales rankings de estabilidad política y solidez democrática en América Latina. Esto refleja la sólida tradición democrática del país, basada en una transparente política de gobierno y en una amplia libertad económica. Gracias al entorno favorable para la inversión y al buen desempeño macro económico del país en los últimos años, Uruguay se ha posicionado como un destino confiable y atractivo para los inversores extranjeros. Asimismo, su ubicación estratégica y los acuerdos internacionales celebrados con las economías más importantes de Latinoamérica potencian el desarrollo del país como un hub regional.
Entre el Mercosur, sus estados asociados y el TLC con México, a través de Uruguay se puede acceder a un mercado de 400 millones de personas, que acumula el 80% del PIB y el 81% del flujo de comercio exterior de América Latina. El país dispone de recursos humanos talentosos y altamente competitivos, gracias a la conjunción de varios factores, entre los que se destacan la alta calidad de la formación básica, técnica y universitaria, la flexibilidad y facilidad de los trabajadores uruguayos de adaptarse a nuevos procesos de producción o tecnologías, y salarios competitivos en la región. Uruguay es el país más equitativo, con menor pobreza y mayor proporción de clase media de Latinoamérica. Esto genera las condiciones que le permiten distinguirse como un lugar amigable tanto para vivir, trabajar e invertir. De hecho, Montevideo donde vive y trabaja más de la mitad de su población es la ciudad de mejor calidad de vida de América Latina, según Mercer (2018).
Performance y estructura económica En Uruguay, una economía pequeña y abierta, con creciente proyección hacia el mercado externo regional e internacional, las exportaciones juegan un papel muy importante para el desarrollo productivo local. El sector con mayor participación en el Producto Interno Bruto (PIB) es el de servicios, dentro del cual se destacan el comercio, telecomunicaciones, los servicios financieros, servicios inmobiliarios y otros servicios a las empresas. La oferta agropecuaria, que representa el 6% del producto interno bruto (PIB), tiene una importante contribución a la economía: proporciona la mayor parte de las materias primas para la industria manufacturera, y explica el 79% de las exportaciones del país. Uruguay ha logrado un desarrollo económico sostenido, con una tasa de crecimiento promedio del PIB anual entre 2007 y 2017 de 4,3%. Desde 2013, el Banco Mundial clasifica a Uruguay como un país de renta alta. El ingreso nacional bruto per cápita ha seguido en alza y alcanzó los US$ 16.939 en 2017.
La estabilidad macro económica y el fuerte marco institucional que presenta el país -con reglas claras para el inversor y un atractivo régimen de promoción de inversiones- permitieron el fuerte dinamismo que experimentó la inversión productiva en los últimos años.
La inversión de la economía -medida como formación bruta de capital fijo- se encuentra en niveles históricamente altos. En los últimos años el país se ha caracterizado por recibir un importante flujo de inversión extranjera directa en todos los sectores de actividad. Por otra parte, los precios evidencian un comportamiento estable, con tasas de inflación de un dígito. Se espera que la inflación mantenga el comportamiento de los últimos años debido a una política de control de metas de inflación adoptada por el Banco Central del Uruguay a 6 partir de 2004.
La profundización del proceso de apertura económica llevó a un constante crecimiento del comercio exterior, tanto de bienes como de servicios, alcanzando en los últimos años niveles récord. Dentro de las exportaciones de bienes los principales rubros son: carne bovina, soja, celulosa, lácteos y otros productos de base agro industrial; mientras que en la exportación de servicios se destacan, el turismo, los servicios globales y los servicios logísticos, en virtud del posicionamiento geográficamente estratégico de Uruguay en la región.
En 2017 Uruguay exportó bienes a 170 países, la política activa de alcanzar nuevos mercados, para la colocación de mercaderías extra zona, llevada adelante por actores privados y públicos, ha logrado diversificar los destinos de las exportaciones, disminuyendo la dependencia relativa de los mercados regionales.
Incentivos a la inversión extranjera El inversor extranjero puede operar en el país constituyendo una Sociedad Anónima (SA) – que es el tipo societario utilizado con más frecuencia– de la cual puede poseer el 100% de su capital accionario. También puede operar a través de la constitución de una Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL) u otros tipos de sociedades personales, integradas por socios que pueden ser personas físicas o jurídicas, nacionales o extranjeras 1 . El inversor extranjero también puede optar por operar en el país a través de una sucursal de sociedad extranjera. El tratamiento impositivo de los distintos vehículos societarios difiere en varios aspectos, lo que torna conveniente realizar previamente una planificación cuidadosa para seleccionar el tipo societario a adoptar. Uruguay ha brindado tradicionalmente un marco de seguridad al inversor extranjero por la vigencia efectiva del derecho y por la estabilidad económica. Además es miembro de organismos internacionales que promueven la seguridad de las inversiones, tales como el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) y el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones, con sede en el Banco Mundial. Por otra parte, Uruguay ha celebrado tratados de promoción y protección recíproca de inversiones de capital con varios países, estos acuerdos están detallados en el capítulo de Acuerdos Internacionales de ésta guía del inversor. El inversor extranjero puede instalar su empresa en Uruguay sin requisitos previos, permisos especiales del Estado, o la necesidad de una contra parte local. Tampoco existe en el país discriminación en el tratamiento al capital extranjero, por lo que puede acceder a todos beneficios e incentivos a la promoción de la inversión previstos para las empresas nacionales. A su vez el mercado financiero es totalmente libre, lo que permite la libre compra y venta de moneda extranjera, y el ingreso o egreso de divisas, capitales, utilidades, dividendos e intereses sin restricciones ni necesidad de autorización. El sistema impositivo es único en todo el territorio. No existe ningún tipo de limitaciones para la contratación de personal extranjero (salvo en el caso de las zonas francas, en las que el 75%2 del personal deben ser ciudadanos uruguayos). Los extranjeros que vayan a desarrollar actividades como trabajadores dependientes en Uruguay sólo deben cumplir con ciertos trámites3 ante la Dirección Nacional de Migraciones. Tanto los empresarios individuales como las organizaciones empresariales mantienen una actitud favorable hacia los inversores y empresarios extranjeros que visitan Uruguay. Los visitantes pueden asimismo esperar una acogida amistosa, tanto de los bancos como de las autoridades gubernamentales. Uruguay tiene una política de promoción de exportaciones a través de instrumentos de diversa naturaleza y alcance, todos los cuales cumplen con las regulaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Devolución de impuestos: Adicionalmente a un régimen de devolución en materia del Impuesto al Valor Agregado, existe un régimen de devolución de impuestos indirectos, en virtud del cual el exportador puede recuperar los tributos internos que integran el costo del producto exportado. Admisión temporaria (AT): le permite introducir a plaza, exento de tributos, mercaderías extranjeras procedentes del exterior del territorio aduanero nacional, siempre que se cumpla con fines y requisitos preestablecidos. Estas mercaderías deben ser exportadas después de haber sido objeto de una transformación, elaboración, reparación o agregación de valor determinados, con efectiva ocupación de mano de obra. Previa autorización, se admite asimismo la reexportación o la nacionalización de las mercaderías, en el estado en que fueron introducidas. La exportación temporaria para reimportación es la contra cara de la admisión temporaria, y requiere autorización del Ministerio de Economía y Finanzas para ser exonerada del pago de tributos. Por otro lado, la exportación temporaria para perfeccionamiento pasivo es la exportación de mercadería exenta de tributos para transformarla, repararla, elaborar otra o realizar otra operación autorizada en otro territorio aduanero del exterior, y luego importarla a Uruguay previo pago de los impuestos de importación definitiva sólo respecto al valor de mercadería que haya sido agregado en el exterior.
Draw-back: Este régimen permite la posibilidad de reclamar la restitución de tributos y gravámenes abonados por la importación en régimen general, con posterioridad a la exportación de las mercaderías correspondientes. Programa Operador Económico Calificado: tiene como objetivo el facilitar el comercio internacional bajo un esquema de confianza y seguridad, al certificar a aquellas personas físicas o jurídicas, establecidas en Uruguay, que siendo parte de la cadena de suministro internacional, cumplen una serie de estándares de seguridad y control (Requisitos OEC) y está certificado como tal por la Dirección Nacional de Aduanas tras un proceso de auditoría de su organización, procesos, seguridad, administración y estados financieros. Quienes obtengan la certificación de OEC acceden a varios beneficios, como son: certificado que lo avala como operador confiable y seguro; procedimientos simplificados; menor número de controles y prioridad en los mismos; participación en instancias de capacitación, talleres y eventos relacionados al OEC. Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE): Como parte de los organismos de apoyo al exportador, se dispone de la VUCE, portal web que permite realizar operaciones de comercio exterior (importación, exportación y tránsito) desde un único punto de acceso, conectándose con todos los actores involucrados y cumpliendo las etapas definidas según las regulaciones de cada trámite y de cada organismo involucrado. También se ofrecen funcionalidades para dar seguimiento a los trámites iniciados, verificar su estado y continuar tomando acciones sobre los mismos. En todo momento, VUCE ofrecerá reportes con la trazabilidad de cada proceso, los tiempos de cada intervención, los usuarios que han intervenido y demás información. La participación en el Programa OEC no es obligatoria, y los trámites para obtener la certificación se realizan frente a la Dirección Nacional de Aduanas. Además de estos instrumentos, las compañías multinacionales establecidas en los países vecinos se encuentran particularmente en una buena posición para aprovechar las ventajas que ofrecen los regímenes de: Zonas Francas, Puertos y Aeropuertos Libres uruguayos. El régimen de Zonas Francas de Uruguay le permite a las personas jurídicas que se instalen en calidad de usuarios de zonas francas, el operar exentas de todo tributo nacional, creado o a crearse. En particular cuentan con exoneración del Impuesto a la Renta, IVA, Impuesto al Patrimonio e Impuesto Específico Interno e Impuesto al Control de las Sociedades Anónimas. La entrada y salida de bienes a la zona franca está exenta de todo tributo. Esta exoneración no alcanza a las contribuciones de seguridad social, salvo para el personal extranjero que puede optar por aportar en su país de origen. Por otro lado, el régimen de Puerto Libre y Aeropuerto Libre constituyen uno de los pilares para que Uruguay pueda posicionarse como plataforma logística en el Mercosur, y un centro de distribución para las mercaderías en tránsito. Este régimen se aplica a los puertos comerciales de Montevideo, Colonia, Juan Lacaze, Fray Bentos, La Paloma, Nueva Palmira, Paysandú y Puerto Sauce así como en el Aeropuerto Internacional de Carrasco, y al Aeropuerto Internacional de Carrasco (único en la región). Al operar en un puerto o aeropuerto libre podrá circular libremente sus mercaderías sin necesidad de autorizaciones ni trámites formales. Durante su permanencia en el recinto aduanero portuario, sus mercaderías estarán exentas de todos los tributos y recargos aplicables a la importación, pudiendo realizarse: 13 · Actividades relacionadas con las mercaderías: aquellas que, puedan añadirles valor, modificar su presentación o instrumentar su libre disposición o destino. · Actividades relacionadas o asociadas con los servicios que se prestan a la mercadería, como son: carga, descarga, estiba, desestiba y movilización de bultos, transporte, trasbordo, reembarque, tránsito, removido, depósito, almacenamiento, disposición, abastecimiento de buques, reparaciones navales y otros servicios conexos.